El titular del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos consideró que se enfrentarán dos modelos contrapuestos. Además, habló del presente y futuro de los medios de comunicación.
Para Hernán Lombardi, las próximas elecciones son tan cruciales como las de 1983. En ese entonces, militaba en radicalismo y presidía el Centro de Estudiantes de Ingeniería en la UBA. La actualidad lo encuentra en el gabinete del gobierno nacional como titular del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos. Desde ese lugar, y luego de 36 años en el mundo de la política, el funcionario que tiene a su cargo los medios públicos, no duda en poner en el mismo escalafón la elección 2019 con la que marcó el final de la dictadura militar. “O miramos a una Argentina democrática y abierta el mundo, o miramos a un modelo populista conservador que encima quiere la impunidad”, explica en un mano a mano con LA CAPITAL.
Además, habló del rol de los medios en la campaña, las redes sociales, las fake news, y la actualidad del periodismo. “Nunca vivimos una libertad como la actual en los medios públicos”, sostuvo.
– ¿Qué rol van a jugar los medios de comunicación en la campaña electoral?
– Estamos tremendamente orgullosos de lo que se ha hecho en el gobierno de Macri en términos de libertad de expresión. Había estado severamente amenazada durante los 12 años de gobierno kirchnerista, con serios problemas. Hay que recordar que se incitaba a lo niños a que orinaran fotos de periodistas en la Plaza de Mayo.
Venimos de un tiempo en el que el periodismo era el enemigo. Y en el que el kirchnerismo tenía un relator militante. Hasta el deporte fue contaminado. O donde estaba el record de cadenas nacionales que interrumpían el entretenimiento de los argentinos para que la presidenta señalara con el dedo, lo bueno y lo malo. O donde los medios públicos había sido cooptado por el “seissieteochismo”.
– ¿Cómo es la actualidad?
– Hoy vivimos una libertad de expresión y un respeto a la libertad. Las conferencias de prensa donde todos contestamos de cualquier tema como corresponde, donde cuando ves un partido de la Selección, ves un aviso de lo que hace el gobierno, pero no tiene la pauta tomada como la tenía el gobierno anterior, que era algo bochornoso para una democracia occidental. Entonces, el punto de libertad de expresión en estas elecciones es central.
El papel de los medios independientes en estas elecciones seguirá siendo tan importante como lo fue siempre. Va a poner una vez más a prueba, la calidad , el coraje del periodismo argentino del cual siempre nos hemos sentido orgullosos.
– Es la primera campaña con las redes sociales afirmadas en la sociedad. ¿Cómo va a influir?
– La revolución de las comunicaciones abarca todo. No solo redes sociales, también está whatsapp y las diversas formas que la tecnología permite a los seres humanos que nos comuniquemos. Si las diversas formas han cambiado, también cambian para una campaña electoral. Pero eso no quiere decir que los medios tradicionales no tengan importancia, porque muchas veces las redes sociales reproducen contenidos que se han generado en los medios.
Los medios tradicionales tienden a repensarse, a tener un valor bancario, el valor de la calidad, de la seguridad.
Cuando están responsablemente manejados, los medios independientes son una garantía contra las falsas noticias.y las fake news.
– ¿Cómo se previene el ciudadano de las fake news?
– Nosotros tenemos un manual de procedimiento en los medios públicos. El ciudadano común tiene que tender a buscar la mayor diversidad posible de fuentes. En las redes sociales o en los medios tradicionales que seguirán cumpliendo un rol importante.
– ¿Cree que va a haber mucho de “campaña sucia”?
– Lo hay. Ese tipo de picardías van a existir pero van a terminar volviendo contra el que las hace. Somos optimistas y creemos en a inteligencia de los argentinos. El lamentable episodio que generaron dos militantes kirchneristas en Ginebra con el presidente, les termina volviendo en contra. Los que terminen haciendo estas campañas de falsas noticias van a ser los perjudicados. Tenemos una enorme confianza en la inteligencia de los argentinos.
– Hay un presente complicado en el periodismo por la caída de puestos de trabajo. ¿Cómo ve el futuro?
– Soy optimista con respecto al futuro. Después hay que discutir la transición. El futuro indica que al haber más canales de comunicación, va a tener que haber más periodistas.
Creo que es una sociedad que va a estar hipercomunicada en términos de noticia. por lo tanto va a haber muchísimo trabajo para la gente que se dedica a la comunicación. Eso es el futuro.
– ¿Y la transición?
– Los medios tienen que repensarse de acuerdo a los caminos tecnológicos. Y el trabajo del periodista también. Ese cambio ya existe. Hay que acelerar el procedimiento por el cual los medios tradicionales se transforman porque sino efectivamente hay una amenaza.
– ¿Hasta qué punto considera que la sociedad confía en los medios?
– Depende de las confiabilidades de los seres humanos. La política también ha cambiado. Importa lo que la gente piensa pero también importa su trayectoria, su tendencia a decir la verdad. Nuestro espacio dice la verdad, Macri dice la verdad aunque sea dolorosa. Parte de los dos modelos que van a confrontar en los próximos meses es uno que dice la verdad aunque sea difícil y uno que tiende a endulzarte la oreja y a prometer futuros fáciles siempre fallutos.
La gente va a valorar quien dice la verdad. Pasamos momentos complicados en lo económico y recién ahora empezamos a ver la luz al final del túnel, pero dijimos la verdad. Comparemos esa conducta de la actual administración con la de la anterior que decía que había menos pobres que en Alemania.
– ¿La situación económica tendrá un rol central en la elección?
– Creemos que van a confrontar en esta elección dos visiones diferentes. La nuestra que cree que la Argentina tiene amplias posibilidades de desarrollar fuerzas productivas en el país, que cree que hay que tener una inserción inteligente en el mundo, que cree en la división de poderes. Contra eso, hay otra visión que es la que representan Cristina Fernández y Alberto Fernández que creen en la concentración de poder absoluto alrededor de la presidencia, que no cree en el federalismo, que cree en una economía cerrada, que no cree en el comercio internacional como factor de desarrollo y que cree que sus amigos tienen que ser Venezuela, Irán y tres o cuatro países más.
Son visiones diferentes. Esperamos que sea una campaña con respeto donde todas las ideas sean debatidas. Es una elección tan trascendente como la del 83′. Yo era joven y la viví con mucha emoción. Es tan crucial como la del 83′.
– ¿Cómo define lo que hay en juego?
– Define si ratificas un camino republicano, institucional, una economía moderna insertada en el mundo que tiene dificultades pero que las reconoce e intenta solucionarlas, o un modelo que a mi gusto es populista conservador que piensa que hay un lugar atrás donde podés estar mejor. Nosotros miramos el futuro, ellos miran el pasado. Es tan importante esta elección como la del 83′.
– ¿Cuáles son las similitudes?
– Pasan las mismas cosas. Esto me obliga a repensar quienes son los conservadores en la Argentina. En el 83′ estaba el gobierno de Alfonsin que quería la democracia, las instituciones y quería juzgar a los responsables. El entonces candidato Luder propuso validar la ley de autoamnistía de los militares: que no se juzgara a los militares. Porque decía que eso dividía a los argentinos.
Ahora, con todos los cambios tenemos la misma actitud fundante. O miramos a una Argentina democrática y abierta el mundo, o miramos a un modelo populista conservador que encima quiere la impunidad.
Cuando escucho a Alberto Fernández que dice que van a revisar las actuaciones de los jueces, se está llevando puesta la división de poderes. O cuando escucho a Mempo Giardinelli decir que se necesita otra Constitución. Hay voces dentro del kirchnerismo que no tienen una visión republicana y de liberalismo político que tenemos nosotros.
– ¿Cómo considera que han tratado los grandes medios a la gestión de Macri?
– Creemos en el periodismo independiente y han dado muestras claras de su idoneidad. Por lo tanto, no es nuestra misión juzgar lo que dicen los medios. Nuestra misión es darles la libertad para que todos se puedan expresar.
– ¿Cree que en la grilla mediática haría falta alguna voz más crítica?
– Me parece que hay muchas voces críticas y está muy bien. Creo en el periodista. No creo que ninguna empresa le de ordenes al periodista. Esa idea de que el dueño del medio le da ordenes al periodista, es subestimar al noble oficio del periodismo. No es así. Cada periodista actúa con independencia, por supuesto que hay líneas editoriales pero cada periodista tiene que opinar con libertad, como sucede en los medios públicos. Nunca vivimos una libertad como la actual en los medios públicos. Estoy orgulloso de esa libertad. A veces me critican sectores afines al gobierno por la cantidad de voces críticas que se escuchan en la TV pública. Para nosotros es un orgullo.